un torrente de luz que me invade,
un camino que se abre en la espesura,
para llegar a los bosques eternos,
donde brotan manantiales bajo los cielos
y las suaves brisas acarician mi rostro.
Tu voz es la serenata
bajo la hoja en un día lluvioso,
y tu sonrisa el destello entre lluvia que cesa,
juegas danzando entre la hojarasca,
y tus suspiros son auras cubriendo las ramas.
bailando sobre ellas mariposas y luciernagas.
He sentido cuando acaricias mi rostro
que puedo guiar mis manos,
hacia el corazón del bosque,
convirtiendome en duende,
para hechizar los senderos por donde transitas
y crear un lago azul donde el tiempo se detiene.
La melodia de tus labios... es el sendero hacia tu alma,
y el lago azul el sentir recorriendo la mía,
un manto de estrellas sobre el lago,
y la luna bañando nuestros cuerpos...
¡Tus alas ahora son mías!
Y nuestros cuerpos ungidos en plata sueñan...
Somos el sol y la luna en el lago tranquilo
no nos acechan ni la lluvia ni el llanto,
entre suspiros amamos en la incierta noche,
que la luz de la luna nos presta...
la calidez de tus besos,es la magia en mi mirada
y la ternura de mis caricias,es el sosiego de tu anhelo.
Aldebarán
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