Cuando despiertas el loto
de mi esencia
!Vuelan los cisnes blancos
sobre los jardines turquesas¡
En la caja de pandora
transmutada,
se hielan las hienas de la
mente en el carrusel de la ascensión.
¡Oigo,el murmullo de la
fuente del saber!
Haciendo vibrar el
romaniente arcoiris,
haciendo danzar el
diamante en el grial de mi corazón.
¡Lanzo,a través de las
cascadas del alma la llama dorada!
Los portales se
abren,fluyendo la calidez del fuego escarlata,
llegando el monzón que
depura la yerma malla en su ocaso.
!Oigo,el sonido de la
estela mágica del susurro de tu alma!
Acariciando las laderas de
el aura con que te envuelvo,
en la biblioteca milenaria
de nuestra Madre.
¡Llegan,con las
guirnaldas del véspero la sinfonías de las esferas!
Encendiendo los
manantiales que brotan de mi mirada,
iluminando el sendero en
las edades plateadas de los ciclos
que moldean en la eterna
marea,la joya en el engarzado.
¡Oigo,el adagio y el
salto del ángel !
Que moran en mí,surcando
sobre las olas cuando navego,en azul infinito.
¡Veo,el océano
cristalino de tu alma reflejado en el manantial!
De los eternos suspiros
que se pierden,
en los acantilados
abisales de la Fuente sin principio ni fin.
¡Oigo,el latido eterno de
la creación y del amor!
En los aterciopelados
susurros de tu mirada,
que evocan la llegada de
la hermandad de los guardianes del tiempo.
¡Mueren,los valles de
espinas y renacen las praderas de los girasoles arcoiris!
¡Oigo,el silencio de las
ciudades zafiro!
El tránsito de la armonía
por las calles diamantinas,
que emergen como soles
bañando los campos de la era dorada
bajo el amor del padre
cielo y la brisa blanca del padre sol.
La luna estalla en
lágrimas esmeraldas¡Puedo ver el nacimiento crístico en toda la
humanidad!
Francisco Javier,para mi flor de
lis,Niama

